SANTIAGO AGAIN...

Me había olvidado de Santiago;

de la Alameda, los vehículos que van y vienen.

De la gente que siempre va apurada.

De las micros orugas que ya están partiéndose en dos;

De los animales abandonados en las calles…

Y de los pobres…

Vi muchos en esto días.

Por las calles pidiendo limosnas,

algo de pan, monedas para comprar “algo”.

Los veo afuera de la Quinta Normal,

con los pies envueltos en lona y caucho,

acompañados por perros, también abandonados.

Se lavan la cara y los pies en la pileta de afuera.

Y los perros toman agua.

Se sientan en el pasillo del metro,

duermen bajo las bancas de Matucana.

Beben alcohol para pasar las noches.

Se cubren con mantas deshilachadas para el frío.

Ha hecho frío.

Ya no caminan…

Se sientan durante el día y miran a las micros pasar con velocidad.

La gente corre al metro en las mañanas…

Andan apurados.

Nadie los ve…

PK.